sábado, 25 de diciembre de 2010

Manifestación de Existencia

Aunque viva a la mierda, aunque me pierda entre mil weás que hacer, aunque sea una perra ingrata nunca olvido esos detalles que conciben mi actuar y cómo interpreto el mundo exterior, el templo de masturbación intra-personal y la agudeza inter-personal que me han atribuido y por encargo aprendí a atribuirme.

Por lo general leer a las personas es sencillo, la gente es simple (somos simples), tenemos las mismas necesidades básicas y el mismo instinto de supervivencia. Respondemos de similar forma ante las cosas y nuestro juicio se encuentra suspendido y supeditado al contexto. Conjugamos un mundo emotivo, adaptativo, racional e instintivo... todo en una mezcolanza de supuesta integridad pervertible hasta con el vuelo de una mariposa, el caos y lo oculto tras el caos: ORDEN y necesidad de estructura. Sólo para seguirla o sólo para rebelarse a ella.

Me da risa recordar mi necesidad enfermiza de saberme "especial", de buscar un misticismo inexistente en lugares que finalmente establecí como erróneos. La mística no es más que el poder espiritual de buscar un equilibrio esquivo y necesario. Irónicamente dinámico y fluctuante entre el menos y el más, siempre acercándose al cero, a la nada inexistente, a un punto central. El espejo, la manada de reflejos, lo que es igual pero contrario/complementario y la agudeza visual que nos hace buscarnos entre toneladas de mierda aplastante, putrefacta y vomitiva. Reflejando lo imperfecto, lo hermosa, lo armónico, lo que desentona y no aceptamos, ocultamos y a su vez validamos sutilmente. Y me dan risa esos juegos, esos realities shows que aceptamos y comentamos coloquialmente, ¡pura camaradería! para llegar al fondo, a lo lejos y mentenernos en suspenso. Un día más, un día menos. Estrés concreto, evidenciado en conductas y sensaciones disruptivas que intentan salir desde y hacia la superficie, rogando por conexión y conectividad. Una vida y otra vida, sumadas no siempre darán más. Una vida y otra vida, muchas veces es sólo una excusa para no avanzar. Una vida y otra vida, una... y tal vez no habrán más.

Envidia

Alaridos asmáticos y distantes
la negación de los espacios hiper-reactivos
quedaron atrás los demás recursos
y se engendra la polipnea ahogante y constrictora.

Ese juego de palabras sibilantes,
y esa necesidad de abrazos esquivos
en mis ojos no veo más que carencia presumida
disfrazada en lágrimas solitarias y sonrisas que olvidan.

Y los juegos de mi ego enfermizo,
esas piedras que me tienen las rodillas hechas mierda
de tantos tropezones y caídas torpes
moretones en mi cuerpo y mi cabeza.

Y los ojos que me gritan desde dentro
las mil gracias y felicitaciones honestas
a cargo recibo indiferencia
que me mata entre sueños y entre señas.

Pierdo nociones de distancias
¿Qué tan alejada estoy de las certezas?
¿Tanto cuesta un "gracias" merecido?
¿Tan complejo es mirar y no darse cuenta?

Me cansé de la falta de estructura ajena
de las promesas que no se cumplen
de los compromisos que no se asumen
de las culpas que se esfuman bajo tierra.

Y acaso, ¿sólo me basta la conciencia?
la vanidad me persigue y me encuentra
a ratos olvido lo que realmente me importa
la tranquilidad de polvo, hojas verdes y cuestas.

lunes, 29 de noviembre de 2010

Ruge Leo, el léon.

Aislado entre los cerros
muere en silencio, muere de dolor.

Ruido

Me envenena toda esta tormenta
esos giros, esos tic tac incesantes
esos brazos amortajados, temblorosos, desviados.

Me envenena como un cáncer
succionándome la vida de a poco
ganando espacio, ganando minutas, ganando polillas.

Me envenena de frente, olvidando toda opinión gastada
toda palabra vista de mil formas y mil veces
como circuitos repetidos, al revés y reveces.

Me envenena los oídos, me eriza los sentidos
me ensordece, me vulnera, me enloquece.

Y golpeo los tambores caóticamente
y soplo la flauta, desafinadamente
y rompo la guitarra, pisoteándola fuerte
y quiebro tu espalda, cruje entre mis dientes.

Me envenena y me desvío, me río, me suicido.
DESAHOGO.

sábado, 20 de noviembre de 2010

Sonidos

La sencillez de un sentimiento que irradia inocencia
la necesidad de volver al vientre materno cuando todo pierde sentido
cuando los miedos nos invanden, el sistema inmune debilitado
el abrazo que reconforta luego de las malas noticias
en anhelo de no quedar allí, muriendo en silencio.

Identidad, carga de dolores a cuestas
carga de palabras que nunca se quisieron decir,
carga de actitudes que nunca debieron existir
la necesidad de pedir perdón y volver a tranquilizar el descanso.

Sin sobresaltos, sin huidillas, sin ronquidos que entorpecen la paz.

El deseo incuestionable, con incesante y excasa libertad
viajando desde dentro, los navíos y naufragios
la fuerza de manos quemadas sosteniéndose en un compás.

Corriendo, dejando los ataques asmáticos detrás
dejando los miedos, ensayando, volviendo a cantar.

Cajas de escasez arrimadas a murallas caídas.
Vuelve, tímida y esquiva... la absurda sensibilidad.

Caprichosa, se estira, enloquece
aprisiona letras y las lanza, las revienta, las alerta
¡Bandidas vendidas! han vuelto, se van...
...se esconden, caminan, gatean, vuelven a su forma inicial...

miércoles, 27 de octubre de 2010

Esencial

Acallando el ego desde dentro
comienza la desesperación por los pasos
las horas, los instantes, los momentos.

Acallando el refugio muerto
hacia el que corren las letras furtivas
anhelantes de pliegues, de dobleces, de forma.

Dibujándose a si mismas apesumbradamente
royendo sus propios bordes, mutilando su propia estela
buscando con angustia la forma sensible... perfecta.

Intentando con golpes certeros magullar mi cabeza
esa que pierde el tiempo, piensa, piensa, piensa.

Actuando se concibe el destino, las ideas son sólo la esencia.

domingo, 24 de octubre de 2010

Foco

Los tiempos parecen dar vueltas
a la esquina, a la inversa, a la directa. Alas.

Vuelan a jirones mis planteamientos, mis metas
la sangre de arrebol musicalizada en la adolescencia,
los escritos de la niñez, los amigos de toda una vida.

Los anhelos de conquistar conocimientos esquivos, dinámicos
cambiantes a cada instante, cambiantes a lo lejos
como esa nubada fría que me sorprendía por instantes
caprichosa lluvia, velos de nube, cumbres de sol entre las aguas.

Una vida entre caretas.
La niña-mujer caprichosamente grosera
escondida bajo un delantal blanco eficiente y respetuoso.

La niña-mujer soñadora e incompleta
escondida bajo el alero de una mente inquieta y revoltosa.

Las mitades dicotómicas, duales y complementarias. Lo sentenciado y la esperanza.

Las estrellas brillantes que sólo alumbran en la muerte lejana. Lo infinito de las distancias.

Los tercios tripartidos, triskelizados. La razón, las emociones, lo instintivo.

¿Por qué anhelo esos desvíos? ¿Por qué se funden en mis sueños coloridos?

Demasiadas aristas y estrategias, demasiadas conexiones e insurgencias.
Basta de divagar, basta de inventar. No puedo deshacerme de mi único vicio... el soñar.

sábado, 16 de octubre de 2010

Idea en Espera

Tengo una tristeza acumulada a cuestas
entre el espacio y la espalda, rozando la médula
dejándome paralizada, insensible, inmutable, medio muerta.

Busco refugio bajo las capas de tela negra
a distancias ínfimas del frío, de la lluvia, de la tierra.
Escapando hacia los soles inventados entre millares de letras
allí encuentro lo que busco... olor a sangre y hierbas frescas.

Dibujando pentagramas, eneagramas y casas plagadas de estrellas
¡Dulces mentiras baratas! de las que me alejé medio ciega.
Escalofríos entre las piernas, piel erizada, sensación de tormenta.

Taladros que perforan mi cabeza, recuerdos imborrables
que a cada instante se reinventan.

Ansiedad insistente, promesas que se quiebran
no creo en lo que pienso, no quiero que amanezca.

Estancada en la noche, cogiendo aire a borbotones
razguñando el rocío, bebiendo lo infinito de la intimidad.

Fractales coloridos, formas infinitas, ausencia de desgaste
melodías guiando la lentitud de las sinapsis en mi cabeza
acordes reconfortando mi leal histeria.

Versos desunidos...

Murió mi necesidad de un pensamiento holístico,
murió todo atisbo de conexión.

No hay reflejo, no hay lamento...
no hay más deseo, no hay más temor.

Adiós soledad, adiós fantasmas, adiós-i-realidad.

domingo, 22 de agosto de 2010

Animando a la muerte
con silbidos incesantes
cuando las palabras ya no resuenan.

Entre la angustia y la tormenta
tus azotes me encadenan
me afirman dulcemente
y mi energía se renueva.

Siento tus vibraciones a lo lejos
siento tus caricias sobre mis piedras
adormecen la frialdad de la roca
y suavizan la miseria.

Animando la vida


con latidos excitados





cuando me he alejado de la soledad.

sábado, 21 de agosto de 2010

Lluvia

Me gusta la lluvia, pero esa lluvia seca
que te espanta los demonios y serena las acequias.

Esa que transita lento purificando las huellas viejas.

Cantando entre viñedos, maizales, centeno, cebada
Germinando las esperas, matando la infancia.

Quemada la garganta, resecas las pupilas, pálido el semblante.

Ojeras que caen pesadamente como zombies en el rostro
con el zumo madurado a cuestas, engendrando el paso seguro, exagerado, torpe.

Deteniendo el sonido de relojes imprecisos, empapando, desnudando
sometiendo a su fluidez exageradamente refrescante.

Ay! lluvia... que escurres por mi pecho y mueres en mi disfraz farsante.

sábado, 3 de julio de 2010

Dominatrix

Las cadenas que atan fuertemente las manos por la espalda, volviendo las flexiones y reflexiones hacia atrás, hacia atrás, hacia los mundos ya conquistados, hacia el pasado, hacia lo que no volverá.

El cuero negro ceñido a las formas propias, dibujando siluetas que se contradicen con el asco funesto que sienten los amantes de lo clásico y conservador. Mirando de reojo lo que los excita, incapaces de satisfacer sus ansias de carne fresca.

Las botas ajustadas que terminan en punta y someten con un solo golpe en las estructuras blandas, regocijando con un alarido de dolor. Pisoteando el orgullo, haciendo crujir los huesos, dejando huellas delicadas, finas, eternas.

Arrodillado ante la deidad de la copa, de la que sostiene y a la vez resguarda el fruto fresco que posiblemente se engendrará. Mas, la nueva vida no se crea en ese saco... está hecho de nudos viejos, infertilidad.

Subordinando el juicio de quien sostiene su mandíbula con un bozal, haciéndose dueño de un mundo en el que necesita ser humillado y maltratado teatralmente, sintiendo el dolor físico infringido por el supuesto sexo débil... ¡ja!

Látigos que terminan en púas de hierro, maltratando la carne, hiriendo la piel, desencadenando la fluencia de la sangre cálida y fresca que emana de entre los lugares más visibles, a rojo vivo!!!

¡El mundo de los deseos ocultos! de los fetichismos, los deliciosos fetichismos y el placer concebido en exceso de dolor... de la angustia que hace gritar en éxtasis, embriagados por la sublimación de lo irreal.

viernes, 2 de julio de 2010

Colon

La muerte comienza en los intestinos, donde la mierda putrefacta encuentra un ambiente ácido para plagar de bacterias cuneiformes que se divierten en el circo de lo masticado, digerido, asimilado.

Pasan los días y alimentamos un ambiente oscuro, húmedo, de olor penetrante y desagradable. Pasan los días, las tripas se llenan y comienza el viaje de la expulsión, donde lo inútil encuentra su pase gratis de salida, donde los diamantes en bruto no asimilados se alistan a emprender un viaje sin retorno hacia el olvido, hacia un espacio ilimitado.

La muerte comienza en los intestinos, mientras la digestión puebla los espacios más recónditos, aquellos nudos y dobleces propios de las franjas que le siguen al estómago. Desde allí la invasión se hace evidente llegando al esófago, produciendo naúseas y palabras vomitivas en pleno espacio de bilis y escondites. Escondidos entre 4 paredes, expulsando los montones de energía ingeridos... como si con eso se pudiera llenar el vacío interior que duele y resquebraja los pensamientos.

Doom

Aullidos que emergen desde las fauces de la oscuridad
donde se congelan los colores otoñales
y se pierden los pensamientos insanos de púrpura perdición.

Anhelos de sangre, hilos de sangre descendentes
mediados por los juegos azarosos de la gravedad.

Instrumentos lentos, latidos potentes, los últimos estertores.

Destrozando la piel, las vísceras emergen húmedas
porque este sonido no emerge del pensamiento
duele y se concibe en las entrañas.

Demencia aprisionada en versos, en notas, en lamentos.
¿Como resucitar la esperanza que ha muerto
cuando el primer acorde te condena?

Supuesta paz desencadenada, alivio momentáneo
mandrágora suspendida sobre el pensamiento.

Y te vas a la mierda!!!
la introspección duele...
el conocimiento de tus limitaciones duele...

Duelen las emociones, la distancia, el aislamiento...
duelen los recuerdos, duelen las miradas que ya no volverán
duelen las ausencias, duele la búsqueda de la felicidad esquiva
duele tu rostro sobre el mío, aspirando mi vacío interno.

Un paso tras el otro... motivados por el miedo y el dolor
¿Acaso existirá la paz de la tumba?

La tierra me mide en base a errores
a incontables gusanos royendo energía
a cotidianos y minúsculas gotas de vida.

No me queda tiempo para encogerme en la guarida
el descanso eterno me produce desesperación.

lunes, 28 de junio de 2010

Patíbulo

Vuelan hasta mí tus sueños y la sensación de quedar estancada
tras las flores que tejen distancias
tras los mantos grises aprisionando la piel
traspasando el velo encuentro la nada
que me sabe a momentos borrados.

Camino como si mis pasos fueran ideas
lentamente, pausadamente, engendrando minutos desiertos
gritando verdades a medias, selladas por el miedo a actuar.

Perdiendo la contienda, me alejo de todas las batallas
con pausas acalambradas de tan poco andar
furiosa, todo me sabe a huelga
a inexistencia comprensible y exceso de vacuidad.

Esclava de vanas ilusiones y esperanza
sopesando los días con mil veleros sin anclar
los esteros de aguas profundas nunca me han dado confianza
nunca he sabido respetarlos, nunca aprendí a callar.

Sensibilidad

Fondos de anhelos y la re puta que te parió.

domingo, 27 de junio de 2010

"El pesimismo del conocimiento no impide el optimismo de la voluntad" (Gramsci).

Sin

Ausencias, sueños y cansancio
angustia autoinfringida por una impaciencia a ratos malsana
a todo eso estoy acostumbrada...
¿acaso los peces siguen respirando fuera del agua?

sábado, 26 de junio de 2010

Jengibre

Formas que se curvan y se anidan
formas que se juntan y se acercan
formas que se buscan y se encuentran
formas que se baten en la palestra.

Formas que se pelan con cucharas
y su aroma me refresca
formas que danzan entre ingredientes
y condimentan nuestra espera.

Formas de colores suaves
que emergen desde la tierra
creciendo a ras de suelo
hasta que la huerta se renueva.

Formas de sabores singulares
que atraviesan mi cabeza
y quedan en mi retina
mientras los días nos acercan.

Formas que te veo disfrutando
mientras preparas nuestra cena
miro a ratos lo que falta
¿acaso olvidaste la receta?

Ciclo

Cuando me enajena la búsqueda perpetua
las obsesiones y manías intencionadas a medias
busco regazo al cual asirme
transitando emociones austeras.

A ratos observo y sé que lo tengo todo
al instante venidero ese todo se disgrega y despedaza
rebotando tus palabras, tus benditas palabras.

Sigo buscándote entre líneas
me dejo enredar en tu piel cálida y descalza
luego huyo nuevamente hacia el frío
porque a ratos no soporto estar atada.

Y subimos bajando, venimos yendo, nos acercamos alejando
generando diálogos que me despedazan
triunfan las risas estridentes, triunfan las lágrimas más saladas.

viernes, 25 de junio de 2010

En Marcha

El paso que huele a óxido retoma lentamente el rumbo hacia lo conocido, hacia lo propio, hacia el terreno psicológico palpable dueño de una menguante direccionalidad.

Vuelve hacia la ciénaga escarlata que se desata entre mis torpes dedos, arañanado fuertemente la piel del berrago a esquilar. Y se resquebraja la guerrilla interminable con mi desnudez interna, esa que desata la lengua literaria y la lengua carnal. Aquella ramera de las letras que ofrece la entrepierna a las palabras sin vacilar, reconociendo en ellas a su único credo, el único amante capaz de satisfacer aquellos deseos que enardecen la imaginación voluble.

Partiendo nuevamente hacia las rimas, sobre los versos, en las prosas que emergen y se desatan, que se revuelcan bajo la almohada y se encogen entre las sábanas buscando instantes de placer, de descanso, de llanto desesperanzado, consuelo y a ratos conformidad.

Nace el día e intento gritar que le pertenezco a la noche. Ni siquiera aflora un eco y me sitúo entre todos los proyectos que me apasionan y escondo mi verdadera identidad. Soy una esquizoide perdida entre mis propias ruinas, huyendo de mi risa, huyendo de mis ojos hacia las agusanadas cuencas, hacia la afonía y un rostro sin expresividad. Rehuyo del placer poniendo el alma en otras almas para lamer la energía que emana cálida y sincera.

Mi risa ha vuelto, mi espíritu agradecido descansa una vez más... hasta que la noche me atrape y vuelva hipnotizada a su embriagante fugacidad malsana, donde grito y lloro entrecortadamente porque la tristeza es mi leal consejera, porque los recuerdos son mi talón de aquiles y a la vez son mi verdadera fortaleza.

Etérea

Etérea entre mantos de hierba,
entre aquellas incipientes verdades incofesas
entre multitudes de proyectos que me alternan.


Etérea recordando la necesidad de la tristeza
el vacío de aquellas miradas en espera.


Etérea riendo entre dudas y sus respuestas
viendo como transcurre mi vida a medias.


Etérea palpitante de errores pasados
donde la melancolía me aferra
donde revivo y asumo mis vergüenzas.